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Lo vi hace 10 años cuando se estrenó y ya me dejó estremecido. Esta vez lo he vuelto a ver con los ojos y la sensibilidad de la actualidad y confieso que me quede desolado, conmocionado. La alarma es muy grande ya. Nos quedan muy poquitos años para rectificar y quizá sería necesario visionarlo al menos una vez al mes para no olvidarnos de la inmensa tragedia que se nos viene encima. Al no sufrirla todavía en nuestro día a día (aunque en muchas partes del mundo hace muchos años que sufren nuestra demanda de bienestar), no nos parece del todo real, palpable. Nosotros somos los adultos, nosotros somos el ejemplo, nosotros los adultos somos los responsables. Nuestras acciones diarias, aunque parecen pequeñas están causando grandes destrozos que no vemos y también podrían generar grandes cambios que nos beneficiaran.Y nuestras demandas pacificas a las grandes corporaciones que hacen caso omiso a las denuncias, dejando de consumir lo que ellas producen.
En tan solo 10 años, dicen los científicos, ya no habrá vuelta atrás…Nuestros hijos que ahora tienen pocos años heredaran un planeta moribundo.
Las guerras para conseguir agua serán una realidad y las aguas limpias de los mares, la riqueza y variedad de la fauna y los pulmones del planeta serán historia. Suena a alarmista. Ojalá me equivoque.
Mi hija de 9 años que se sentó un rato a mi lado a verlo, dijo algo que me sumió en una gran tristeza: “ Me gustaría tener la edad de la abuela (casi 80 años) para no tener que vivir todo eso que dicen que pasará”
Palabras demoledoras pero que muestran su reflexión (sin ser una experta en ecologismo y medio ambiente) de lo que vendrá ¡SI NO ACTUAMOS YA!
En sus 200.000 años de existencia, el hombre ha roto el equilibrio de casi 4.000 millones de años de evolución de la Tierra. El precio a pagar es considerable, pero es demasiado tarde para ser pesimistas.
Yann Arthus-Bertrand, con sus imágenes inéditas de más de 50 países vistos desde el cielo, compartiendo con nosotros su capacidad de asombro y también sus preocupaciones, coloca, con esta película, una piedra en el edificio que tenemos que reconstruir, todos juntos.